Nueva York estaba convulsionada el martes por el nacimiento de la pequeña Blue Ivy, la hija de una de las parejas más glamurosas de la Gran Manzana, la diva del pop estadounidense Beyoncé y el rapero Jay-Z.
Camiones de la televisión y curiosos permanecían en la puerta del Hospital Lenox Hill en el residencial barrio del Upper East Side, en Manhattan, esperando para ver a la beba nacida el sábado y a sus orgullosos padres.
Beyoncé, de 30 años, tuvo a la niña por cesárea el sábado en la noche en un ala privada del hospital, junto a su marido Jay-Z, cuyo nombre legal es Shawn Carter.
Jay-Z acaba de lanzar una nueva canción titulada "Gloria" con el acompañamiento de fondo del llanto de su hija, y los tabloides neoyorquinos celebraban en sus portadas el gesto del emocionado padre.
"Canción de felicidad", titulaba el Daily News con una foto gigante de los padres.
En "Gloria", Jay-Z hace referencia a la pérdida de un embarazo por parte de Beyoncé en el pasado: "La anterior vez la pérdida del embarazo fue tan trágica/teníamos miedo de que desaparecieras pero no/baby, eres mágica", dice la letra.
Como corresponde a una celebridad, Blue Ivy ya se encontraba también en el centro de su primera controversia.
Según la prensa local, parte del personal del Lenox Hill y algunos pacientes estaban enojados por el modo en el que se había comportado la familia Carter adueñándose del lugar para uso privado.
Un habitante de Brooklyn dijo que no había podido ver a su hijo recién nacido internado en el sector de cuidados intensivos a raíz de la invasión del equipo de seguridad de Jay-Z.
"La gente no tiene que ser tratada de este modo cuando se trata de niños enfermos", afirmó Neil Nash-Coulon el lunes al canal de televisión CBS.
De su lado, el hospital respondió en un comunicado en el que habla de "desinformación" y asegura que se hicieron "todos los esfuerzos para garantizar el mínimo de inconvenientes para las otras familias" que vieron nacer a sus hijos en ese lugar en los últimos tres días.
Beyoncé, quien alcanzó la fama a finales de la década de 1990 como principal vocalista de Destiny's Child, ha ganado 16 premios Grammy. La artista anunció su embarazo durante la celebración de los premios MTV Video Music Awards en agosto, cuando en la alfombra roja le dijo a los periodistas: "¡Tengo una sorpresa!", mientras se acariciaba el vientre.
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